Thursday, April 03, 2008

Los piquetes de la abundancia

Fueron cercando al sector. Los productores ganaderos vienen sufriendo las políticas oficiales. Cierre de exportaciones, intervención del mercado de Liniers, precios máximos, amenazas con la ley de abastecimiento, permisos de exportación, peso de faena, controles, amenazas. Los ganaderos reclamaron como pudieron, dialogaron hasta sentirse frustrados y cansados y por ultimo decidieron, los que podían, retirarse del negocio. El gobierno estaba advertido, no va a alcanzar la carne para el mercado interno. Las consecuencias hasta ahora han sido, perdida de vientres, baja feroz de las exportaciones, papelones internacionales y lo menos pensado por el gobierno: suba de precios al consumidor. La política de control de precios viene fracasando rotundamente. Si baja la oferta y la demanda se mantiene o aumenta, sube el precio. No es muy difícil de entender. Parece que algunos ven otra película.
Los tamberos han sido los primeros en marcar el camino. Siendo una actividad muy sacrificada y donde hay mucho capital en juego, fueron ninguneados por el gobierno y por las empresas lácteas. Todos firmaban acuerdos con el gobierno garantizando precios máximos en góndola. Estaban todos en la foto menos los tamberos. La base del arreglo eran subsidios para sus empresas y dejar planchado el precio de la leche a los productores. Otro éxito de la política de control de precios fue la caída durante dos años consecutivos de la producción a nivel nacional. La caída fue de alrededor de un 8% anual. Ante tanta injusticia, decidieron tomar las plantas y evitar que estas sacaran los productos elaborados. Lograron que se reviera la idea de Comercio de bajarles la leche diez centavos y que les dieran un reintegro de 7 centavos por litro durante tres meses. Igualmente fueron migrando de a poco hacia la agricultura.
Los trigueros no la tienen fácil tampoco. Cerraron los registros de exportación y permitieron que los molinos compraran al precio que ellos querían el trigo de los productores mas necesitados, los cuales no podían dejar de vender.
Todo este panorama hizo que los que podían, se refugiaran en la soja.
Ahora fueron por todo. Le entraron a la soja y al girasol. Todos los que venían sufriendo los embates de una política equivocada hacia el sector reaccionaron.

Ante el mensaje presidencial, no solo se caldearon los ánimos del campo, sino que

Ante el mensaje presidencial, no solo se caldearon los ánimos del campo, sino que mucha gente extra sectorial se sumo a la protesta vía cacerolasos.

Ahora la protesta va mas haya de las retenciones y la política agropecuaria en general. Surgen muchas preguntas: ¿que hacen con la plata no coparticipable de las retenciones? ¿Quien controla los gastos? ¿Porque no se hacen obras de infraestructura? ¿Se usa esa plata para comprar voluntades de intendentes, gobernadores y demás actores de la sociedad?, ¿porque siempre le sacan al campo?, ¿no hay otros sectores que vienen ganado mucha mas plata que el campo sin tener al estado como socio en sus ingresos?, ¿la publicidad oficial se usa para cosas concretas o es para manejar los medios? ¿Por qué los gobernadores e intendentes de todo el país tienen que cabrestear ante el menor llamado de la casa de gobierno?, ¿donde quedo la independencia de poderes?

¿Porque se tiene que llegar a la acción directa de los productores? Si hubiera un sistema democrático funcionando, los diputados, senadores, intendentes, gobernadores, serian los interlocutores de los ciudadanos ante problemas concretos. Los temas se podrían debatir y acercar soluciones de fondo a problemas de fondo. Si se usa la caja para armar un esquema de poder y todos los actores tienen que cumplir lo que dicen arriba porque sino no les mandan los fondos o les frenan las pocas obras de infraestructura que necesitan, los ciudadanos quedan solos. Al no sentirse representados reaccionan de la única manera que pueden. Hacerse ver, escuchar y notar por otros medios. Nunca hubo una reacciona así del sector. ¿Será injustificada?

Lamentablemente, ni Moyano ni D Elia van a solucionar el problema. Por ahora actúan con una impunidad llamativa.

La solución pasa por dialogar. Hablar y escuchar. No solo la foto. Escuchar los

La solución pasa por dialogar. Hablar y escuchar. No solo la foto. Escuchar los problemas y actuar para solucionarlos. Fueron tantos los años en los que el sector no fue escuchado que no quieren levantar las medidas sin una definición concreta sobre el problema. Nadie en el sector confía en: "levanten el paro y después nos juntamos"

El gobierno tiene todo el poder menos el de las voluntades libres de los productores. Igualmente hay que evitar conflictos con el resto de la sociedad y buscar una salida del problema para lograr revertir el deterioro de todas las actividades del sector.

Por Juan Llauro - Agrositio.com

Thursday, March 27, 2008

los piquetes de la abundancia

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Del corralito al tractorazo

Laura González
De nuestra Redacción
lgonzalez@lavozdelinterior.com.ar

La protesta popular que se inició hace dos días es mucho más profunda que la de diciembre de 2001, hace apenas seis años.

Entonces, la clase media salió a las calles cuando el Gobierno nacional metió la mano en su bolsillo y le dijo que no se podía llevar a su casa los ahorros que tenía en el banco. O, si quería, cada dólar que la convertibilidad le había jurado que existía, ahora valía 1,40 peso. O que esperara 10 años si quería los dólares en la mano.

La que comenzó el martes a las 20 tiene una raíz diferente. Minutos después de que la presidenta de la Nación, Cristina de Kirchner, dijera que las protestas de los productores agropecuarios son “los piquetes de la abundancia” y les endilgara apropiarse de las vacas y dejar las penitas para los otros, la clase media volvió a salir a la calle.

Pero el grueso de los argentinos que empuña ahora la tapa de una olla no es productor agropecuario. No tiene un tambo con leche subsidiada, un matadero con el precio de kilo vivo regulado ni 200 hectáreas de soja a más de 500 dólares la tonelada.

Algunos sí pueden vivir de la bonanza del campo: son comerciantes, profesionales o venden autos y departamentos. Pero mucha gente que vive en grandes centros urbanos y que no tiene nada que ver con el campo se solidarizó con el reclamo rural.

Es que esa solidaridad esconde una gran protesta. La de los precios que suben pese a que el Gobierno se empeña en decir que no. La de la soberbia de quien gobierna y reniega del diálogo. La de la plata que no alcanza.

La de los índices mentirosos, la del empleo que se consiguió pero que ya no es suficiente. La de un tren bala interesante, sí, pero si primero se hacen los caminos. La de la sumisión de los gobernantes (e intendentes) al altar de la billetera. La del discurso que cansa, ése que repite que gracias al matrimonio Kirchner –y sólo a ellos y su política económica– el país resucitó.

Después de la crisis institucional de 2002, la ciudadanía esperaba que se fuera reparando el entramado institucional que se despedazó con la crisis. Si bien entonces se pudieron toma

Si bien entonces se pudieron tomar decisiones sin demasiado consenso, sin la gimnasia del diálogo que exige la democracia, ese tiempo se acabó.

Los tractores que marcharon ayer por el centro de la ciudad de Córdoba y las cacerolas que salen a las plazas de los pueblos de la provincia revelan eso. La construcción tiene que ser para adelante, inclusiva, abierta y humilde.

Sunday, January 13, 2008

Palermo jolligud


En recuerdo de Carlos Mujica.-



¿Palermo Bollywood?...ahh nooo eso es en la India, el bollywood, los intentos de globalización a través del cine en uno de los países mas interesantes y contradictorios de esa parte del globo.

Argentina dejó de ser interesante y contradictoria hace tiempo, pero en Buenos Aires, antigua capital cosmopolita y actual puesta en escena de la película titulada:: " Tango y carne en la ciudad del "deme dos"", convive un nuevo mapa ciudadano, que ubica una ignota zona "palermo hollywood" ahí donde habitaba la parte trasera de los cuarteles hasta la cancha de polo; todo limpito, muy cheto y común claro, pero con un toque escenográfico....somos lindos cuando queremos...Conviven , decía, estos engendros con la vieja villa 21..un terreno que se cotiza a 6000 dolares el m2.....el largo muro y años de negociación, están ahí para recordarnos nuestros asuntos pendientes.
No es la única villa miseria de la Capital federal, es una más.
La cara oculta e ineludible de todas las ciudades latinoamericanas, pero en Buenos Aires, (cabeza de ratón de un cuerpo de león sentado en cantidad de dolares producto del monocultivo, soja para los chinos y viva la pepa para las arcas públicas), el contraste histórico es fatal. Pará!! ...¿repartimos un poco?, quizás los dirigentes y los dueños de la guita, los locales ; no los de afuera que no tienen bandera cuando dejan su propio territorio; puedan entender alguna vez que las políticas sociales inteligentes, no izquierdozas sino inteligentes, son rentables.
La gente quiere, pagar sus impuestos, integrarse al sistema. Sentirse dignos.
Dejando de lado las explicaciones macro ¿tan complicado es?

La historia

La villa de Retiro nació en los años ’40 con una decisión del gobierno nacional, que cedió terrenos baldíos a los grupos de trabajadores italianos. Con el tiempo, el barrio dio cobijo a migrantes del interior del país y a comunidades de países vecinos.
En 1956 era una de las 21 villas de Buenos Aires donde vivían 33.920 personas, ocasión para la que cobró impulso por primera vez la idea de la erradicación.
La revista de los chicos del villa, Retiro News, menciona aquello como un hito, un primer programa de desalojo masivo que “no fue tan violento como los que vendrían más adelante”, dice, porque contempló aspectos sociales como una vivienda digna. Ese primer plan, de todos modos, fracasó como sucedió de allí en adelante: durante siete años se construyeron 214 viviendas para 1284 personas.
Retiro ahora tiene unos 25 mil habitantes atravesados por las empalizadas de la autopista Illia con sus balcones a la barbarie.
Los sectores más antiguos reúnen 33 manzanas en el barrio de los Inmigrantes y Güemes, donde ahora están los restos de Carlos Mugica.
En los últimos diez años, detrás de la crisis, la villa se fue extendiendo más allá de los viejos límites, sobre la 31 bis, derramándose a lo ancho y hacia el cielo.
Las nuevas manzanas urbanizadas crecieron hacia la Terminal de Omnibus de Retiro, sobre las cercanías de los peajes de la autopista y ganaron altura con casas de hormigón y piezas de alquiler de dos y tres pisos, rentadas a 300 pesos al mes.
En total, ésas son 14 manzanas urbanizadas y con otras dos más recientes, según los datos que maneja la Asociación por la Igualdad y la Justicia (ACIJ), una organización no gubernamental que construye la idea de ciudadanía con la promoción de los servicios básicos aún allí, donde la gente vive colgada de la luz aunque hace años reclama medidores a un Estado que prefiere –al parecer– mirar para otro lado, antes de otorgarles un papel.
“¡Después nos dicen que nosotros tenemos antenas satelitales!”, dice Jorge Vargas, un alto de barba franciscana que camina por el barrio. “¿Cómo no vamos a tener esos servicios, si trabajamos? Como no nos dejan pagar el agua, ni la luz, ni ninguno de los impuestos, nos sobra plata para eso.”
Como Jorge, un 95 por ciento de los vecinos parece dispuesto a pagar sus servicios con tarifas sociales porque parece tratarse de una apuesta esencialmente simbólica, dice Albertina Maranzana, abogada de ACIJ. Una tarifa que parece otorgarles el rol de usuarios, y correrlos del de asistidos.
Hace unos días, por ejemplo, un fallo de la Cámara Contencioso Administrativa de la Ciudad de Buenos Aires obligó a reformular la provisión de agua potable para las manzanas 11, 12, 13, 14, 100 y 101 de la 31 bis. Como no hay agua ni conexión informal a la red, la gente recibe camiones cisterna que entran de 8 a 17 para cargar tanques comunitarios. Los vecinos pidieron que los camiones entren de 8 a 22, domingos y feriados, porque el año pasado hubo una semana en la que directamente no entraron.
El proyecto.-

El Instituto de la Vivienda de la ciudad (IVC) es el encargado de manejar todos los recursos que entran y salen del barrio, desde las chapas, el agua potable o las propuestas de nombres de los delegados. En los papeles, sin embargo, las tierras no son de la Ciudad.
La mayor parte pertenece al Organismo residual de Administración de Bienes del Estado (Onabe) y otra parte menor a Repsol-YPF, cuyo terreno está valuado en unos 25 millones de dólares, un dato que atado a los proyectos millonarios de desarrollo inmobiliario, turístico y comercial, proyectados sobre el Puerto de Buenos Aires y Retiro, explica algunas de las divergencias pasadas y futuras sobre la villa.
A grandes rasgos, los urbanistas vinculadas con alguno de esos proyectos manejan dos tipos de soluciones posibles: erradicación o urbanización.


Fragmento de nota de Alejandra Dandan en Pagina 12 (13 de enero del 2007)



Friday, December 14, 2007

impresiones

NO...no importa quién o cómo lo intenten...sobreviviremos.....a las continuidades con botox y vestidito blanco de "yo no fuí", a la corrupción, a los contratos leoninos, a las alianzas tramposas, a la ingenuidad, a las coimas al desabatecimeinto y la desocupación.-
Porque venimos de los barcos y quizás no estuvo bien que elimináramos las raíces de la tierra pero luego construímos y aunque lo intenten nunca lograrán acabar con nosotros; el trabajo de nuestros abuelos, el hotel de la inmigración de la Boca, el campo y sus chacareros del Piamonte y los galeses en el sur enfrentando al viento están en nuestro inconsciente colectivo. Aunque la tierra hoy sea de Benetton o de quien sea.....

Saturday, December 01, 2007


Documental de Francois Pierre Vertraeten (1924)


Mi Buenos Aires querido


Sentado al borde de una silla desfondada,
mareado, enfermo, casi vivo,
escribo versos previamente llorados
por la ciudad donde nací.

Hay que atraparlos, también aquí
nacieron hijos dulces míos
que entre tanto castigo te endulzan bellamente.
Hay que aprender a resistir.

Ni a irse ni a quedarse,
a resistir,
aunque es seguro
que habrá más penas y olvido.

Juan gelman

Sunday, November 11, 2007

esto viene de lejos


Sin pan y sin trabajo: Ernersto d ela Carcova 1893







Discepolo...mordisquito en la radio del 51......
No nos pongamos pesados, ni maniqueístas. qu si perón o el antiperonismo. o si el Kirschnerismo...pero cuando por la radio Discepolo hacía propaganda política y recordaba la masacre de los obreros de la empresa Vasena....en todo caso contaba el camino recorrido.
El camino que Argentina repite una y otra vez: sembrar, recoger, arar y tirar sal....
Volver a empezar....
No nos pongamos pesados ..es solo un poco de historia y el recuerdo de uno de los mejores poetas que dió el siglo XX en Argentina.-

Monday, November 05, 2007

cartoneros en buenos aires











Por Victor Santa María*

En momentos en que la idea de la concertación plural cobra fuerza, hay quienes intentan aprovechar el prestigio de lo que se conoce como “pacto social” para justificar políticas de ajuste, que –pretenden– bajando o conteniendo salarios reduzcan y eviten la inflación. Lo que está en juego, y lo que como trabajadores creemos, es mucho más. Se abre la oportunidad para debatir y acordar el modelo de país de los argentinos, el propio, que dé por finalizado el de “no país” que nos fue impuesto por el golpe de 1976. Porque el Pacto Social no es una Convención Colectiva gigante con la participación de la política, el pacto sólo tiene valor cuando incorpora objetivos e instrumentos de largo plazo que atienden al colectivo social.

La idea de “pacto social” es parte constitutiva de nuestra personalidad mestiza. Nuestra historia registra antecedentes de pactos o acuerdos con los pueblos originarios, en el proyecto colonizador español, en Juan Manuel de Rosas y, más recientemente, en el Pacto Social de 1973, que promoviese Juan Domingo Perón. Sin embargo, cuando se habla de pacto casi de manera automática y atolondrada, se suele identificar la idea con la del Pacto de la Moncloa llevado a cabo en España en 1977, olvidando y no advirtiendo que el nuestro, el de la década del ’70, fue un pacto cronológicamente anterior, pero además conceptual y políticamente diferente. El español consolidó la monarquía y el proceso de ajuste, manteniendo tasas de desocupación de un 20 por ciento promedio por 20 años, en tanto el nuestro logró un crecimiento del Producto Bruto Interno a un ritmo anual del 5,2 por ciento, haciendo crecer el salario real en un 25 por ciento y concretando la participación de los asalariados en el ingreso nacional de más del 50 por ciento.

Para pensar qué pactar debemos respondernos si de lo que se trata es de incluir a los excluidos en la misma sociedad que los excluyó y seguramente lo volverá a hacer, o si lo que tenemos que construir es una nueva organización social. Adelanto que el desafío no es económico, no es legal, no es instrumental, sin duda alguna es filosófico, porque es la filosofía y la política como herramientas para solucionarlo y éstas dos haciéndose cargo de todas las disciplinas, interpreta la realidad y la transforma y es la que puede dar respuesta a nuestros interrogantes, permitiéndonos recuperar la visión integral.

Lo que le falta a una gran parte de los argentinos, de lo que millones de hermanos todavía adolecen, exhibe el eje prioritario y central a pactar: trabajo y vivienda son la necesidad y oportunidad. Trabajo como obligación y como originante del salario; vivienda y su ineludible infraestructura social como base de la reconstrucción de la familia y el tejido social. Ambos para terminar de saldar la deuda social y para recuperar la dignidad.

Ocupar el espacio generando relocalización productiva nos lleva a alentar y retomar la propuesta del filósofo argentino Gustavo Cirigliano, la de construir tres nuevas ciudades de un millón de habitantes cada una, localizadas en los vértices de nuestra triangularidad territorial. Reconstruyendo el poder nacional sobre nuestra riqueza y sobre todo el territorio, recuperando nuestro espacio para ponerlo al interior el proyecto nacional. Trabajo y vivienda, en su calidad de necesidades básicas, constituyen la base a pactar. El trabajo origina salario. La vivienda origina ciudad. Ambas hacen posible un nuevo Proyecto Nacional.

Acabar con el modelo de no país, el especulativo global, impone articular un modelo productivo nacional, para lo cual debemos asumir y anotar que la natural triangularidad espacial argentina define el proyecto, potencia las fronteras hacia fuera y define la circulación comunicacional para adentro. Triangularidad espacial que determina la ubicación del poblamiento en el territorio, en nuestro contexto político-económico-espacial.

Pensemos que La Plata fue una de las últimas grandes ciudades diseñada y construida totalmente nueva, pero también advirtamos que uno solo de los múltiples negocios del sistema especulativo financiero, consolidado en los ’90, se apropió de una ganancia equivalente a haber construido dos ciudades completas justamente como la de La Plata. Si los argentinos las hubiésemos hecho serían parte de nuestro patrimonio, pero además les hubiéramos dado trabajo a millones de habitantes de nuestro suelo que durante esa misma época no lo tuvieron. Los bancos bajo la forma de AFJP acumularon desde su creación una ganancia de más de 10 mil millones de dólares, suma con la que se hubieran podido construir dos ciudades de 200 mil viviendas cada una, lo que demuestra que construir tres nuevas ciudades en los vértices de la Argentina de 250 mil viviendas es un sueño absolutamente realizable, una eutopía que, como enseña el filósofo citado, es una utopía que se concreta. Ejemplaridad que contrasta el modelo especulativo con el productivo y demuestra que se trata de una propuesta viable. La relocalización productiva a que dará lugar es un camino apto para acabar con el (micro)clientelismo, el denostado, el de los pobres y el de los sin empleo, pero también para acabar con el (macro)clientelismo, del que no se habla, el de la apropiación concentrada de los recursos sociales y naturales de todos los argentinos.

Hay otra Argentina por nacer. La que da por finalizado el proyecto “no país”, iniciando el nuevo, en el que el pleno empleo constituya la base de la concertación plural. Esta nuestra convicción es la que aportamos a la construcción del entendimiento social que aspiramos se concrete mediante un amplio y generoso acuerdo político social que trascienda la legítima contienda electoral.

* Dirigente sindical de Suterh y del PJ porteño.